4.4.04

Recuerdo que cuando era pequeño tenia sueños recurrentes de que yo huía,
siempre me levantaba a mitad de la noche sobresaltado, entonces ya después de pasados unos cuantos años me pregunto: ¿De que podría huir un niño de 6 años?, no veía monstruos en mi sueño, realmente lo que veía siempre eran mimos, un mimo con una sonrisa inquietante y papeles de periódico que siempre revoloteaban por allí, un ambiente color sepia era lo que me rodeaba, así como todo oxidado. Lo juro, antes soñaba mucho con eso. Yo corría, huía, recuerdo que hasta una vez lo golpee. ¿Por qué soñaba todo esto?.

Si me pongo a postear sobre lo que solía soñar cuando era pequeño podría abrir otro blog, pero no me gustaría que algunos sicólogos (o siquiatras) improvisados se pongan a hacer análisis de mi psique que ya bastante obstinado me tiene. Escribo sobre esto porque tengo tiempo que no
sueño, o mejor dicho, que no recuerdo que es lo que sueño. Recuerdo que un día, estando yo muy pequeño, soñé con una obra de teatro, no se si alguno que lea este post lo recuerde, pero había un bastón muy grande que usaban para sacar a juro a la gente que realmente lo hacia mal (imagino que será una de esas reminiscencias de principios de siglo, de esas que abundan en las comiquitas blanco y negro), pues ese sueño lo recuerdo como si hubiera pasado en serio, alguien trato de sacar a un individuo del escenario y lo decapito en seco. Eso me impresiono a tal punto que pase como dos días sin poder dormir.


He tenido sueños lucidos de asesinatos, donde he sido testigo y participe. Un día tuve una experiencia tan intensa que realmente dude en que si lo que había visto era un sueño. Realmente alucinante, también lo recuerdo muy bien. Es ilógico que haya pasado ya que era en un lugar que conozco y es imposible que haya pasado algo así allí, jajaja.


El punto es que desde pequeño he tenido una creatividad muy extraña, y excesivamente activa, he sido capaz hasta de ignorar mi realidad circundante y sumergirme en mis pensamientos de tal manera que me ausento de todo, a veces hasta me asusta eso, ¿pondré caras estupidas?, jajaja. Mi madre dice que todo es culpa de mi carácter (literalmente, jajaja), pues bien, he decidido echarle la culpa a mi sique de mis sueños de infancia y también de mi realidad inmediata. Ninguna voz me dicto al oído mientras dormía que ignorara a ese 53R de la realidad paralela dentro de mi mente… ¿o si?. Quizás lo olvide por completo.